Conscientes de las repercusiones que podría continuar generando la escasez de agua potable en la provincia de Bocas del Toro, la Cámara de Comercio, Industrias, Agricultura y Turismo de Chiriquí (CAMCHI), respalda el llamado emitido por los diferentes gremios y exige una solución definitiva a la problemática que también afecta de forma paralela a la cadena de valor turística en Chiriquí.
En este contexto, el Aeropuerto Internacional Enrique Malek y la Terminal de Transportes de David, son puntos de conexión estratégicos para cientos de turistas nacionales e internacionales que llegan a la provincia, previo a su posterior traslado hacia Bocas del Toro.
Es por esto que las afectaciones por la crisis que se agudiza con el pasar de los años, continúa representando una amenaza latente para la industria, pese a los esfuerzos mancomunados efectuados a través del sector privado para potenciar el destino en la región occidental de Panamá; sin dejar de lado la realidad que impacta a los residentes, quienes también comprometen su salud y bienestar.
Siendo el turismo uno de los principales fuertes, no podemos tolerar que situaciones similares continúen empañando la imagen del país a nivel internacional, atentando contra el inicio de la temporada alta, donde muchos ciudadanos tienen cifradas sus esperanzas, tras el fuerte golpe que recibió el sector por los embates de la pandemia Covid-19.
Estamos a tiempo de lograr una solución inmediata y de forma definitiva a éste y otros problemas básicos, entre ellos la energía y el manejo de los desechos, razón por la cual esperamos el accionar del Gobierno Nacional con medidas reales y sostenibles a través del tiempo.
El comunicado fue emitido por directivos de la Cámara de Comercio de Chiriquí, piden brindar solución a este problema en la provincia de Bocas del Toro.
Dos de las islas más visitadas por nacionales y extranjeros en la provincia de Bocas del Toro: Isla Colón e Isla Carenero, llevan varios días sin el suministro de agua potable, lo que ha afectado a residentes, turistas y comercios.
Según las autoridades, todo se debe a la disminución significativa de lluvias que ha producido que los niveles de agua del lago Big Creek, que abastece de agua potable a la población, se encuentren en estado crítico.
El panorama ha sido tan preocupante que el Consejo de Gabinete declaró Estado de Emergencia Ambiental en ambas islas de la provincia "para impulsar acciones que permitan mitigar los efectos que genera la baja precipitación pluvial en esta zona del país".
